Una denuncia vecinal permitió al Servicio de Protección de la
Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) imputar a un pontevedrés, que
responde a las iniciales E. L. H. B., un presunto delito de maltrato
animal por las malas condiciones higiénicas y sanitarias en las que
mantenía a dos animales en una finca cerrada de Salcedo. De hecho, uno
de los perros fue hallado muerto por los agentes debido a este estado de
abandono y a otro le intentan salvar la vida en el refugio de animales
de Os Palleiros.
La investigación se abrió con esta denuncia de un
particular a través de la Oficina de Atención al Ciudadano de la
Guardia Civil. Una patrulla del Seprona se acercó el martes al lugar de
Almuiña, en Salcedo, y verificó los hechos denunciados. Los agentes se
encontraron con una finca cerrada por una valla en todo su perímetro y
con un galpón en el interior de la misma en la que observaron un perro
muerto que estaba atado con una cadena y en unas condiciones higiénicas y
sanitarias "deplorables". Los agentes consideran que consecuencia de
las mismas y de la aparente situación de abandono fue la muerte del
animal.
El Seprona realizó las gestiones pertinentes para la
averiguación de quien pudiera ser el dueño de los animales, logrando
identificar a la persona que finalmente fue imputada. Esa misma tarde
del martes los agentes se trasladaron al lugar con el imputado para
buscar a un segundo perro que hay dentro de la finca y comprobar cuál
era su estado de saludo. El animal fue localizado debajo de un vehículo y
también se pudo apreciar por parte de los guardias civiles que sus
condiciones de higiene y sanitarias son muy deficientes y lamentables.
Su cuerpo está cubierto de parásitos (pulgas y garrapatas) que
provocaron heridas en la cabeza y las orejas. En el momento en el que se
realiza la inspección ninguno de los animales, ni el fallecido ni éste
que todavía estaba vivo, tenían a su disposición agua o comida.
Tratamiento veterinario
Los
agentes recogieron a este segundo animal y realizaron las gestiones
oportunas para entregarlo a la asociación protectora de animales "Os
Palleiros" de Pontevedra con el objetivo de que recibiese tratamiento
veterinario y procediesen a su custodia. La entrega a esta sociedad pudo
realizarse de forma rápida ya que a ello accedió de forma voluntaria el
propietario del animal.
Ahora, en el refugio de Campañó están
intentando salvar la vida de este perro que se encuentra en muy malas
condiciones de salud por su abandono. Según explican desde esta
protectora, ayer los veterinarios todavía no se atrevían a asegurar que
pudieran salvarle la vida, aunque confían en poder hacerlo.
http://www.farodevigo.es/portada-pontevedra/2014/05/29/imputado-maltrato-animal-pontevedres-tenia/1032570.html
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de
Totana ha ordenado iniciar una investigación sobre la empresa
Esprineco, que se encarga de la recogida de animales en la localidad,
por un presunto delito de maltrato animal. El juez aclara, en un auto,
que no se ha podido determinar aún la naturaleza de los hechos ni sus
posibles responsables, pero que los hechos denunciados por algunas
protectoras de animales, y que han llevado al Servicio de Protección a
la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil a realizar un atestado,
«hacen presumir la posible existencia de un delito de maltrato a
animales domésticos».
Según recoge el juez en su auto, un presunto testigo
aseguró, en una denuncia, haber visto cómo un encargado de esta empresa
«recoge animales y se dedica a tirarlos por los pueblos». En su escrito
al juzgado, éste llegó a afirmar que había visto «cómo tiraba gatos
recién nacidos a una cuneta y que uno de ellos fue atropellado por una
furgoneta», además de que «ha visto que arrastran a los perros y los
patean».
La denuncia que ha dado origen a la apertura de esta
investigación por parte del juzgado también puso de relieve un presunto
delito de maltrato animal derivado de la falta de cuidado a los animales
que la empresa presuntamente tiene custodiados en su sede de Mazarrón.
El denunciante afirmó que «no les suministran agua y no les dan ningún
tipo de atención en las jaulas, en las que se encuentran encerrados todo
el día». Estos hechos también fueron puestos de manifiesto por otra
denunciante, según explica el auto. Por el momento, el juzgado ha
acordado tomar declaración como testigos a los denunciantes para poder
depurar posibles responsabilidades.