El refugio de animales de Cambados ha sobrepasado
 todos los límites. El rescate, ayer por la mañana, de dos cachorros y 
dos perros adultos agotaron las reservas de espacio de unas 
instalaciones obligadas a practicar el milagro de los panes y los peces 
con los recursos y con las plazas. Pero hasta la capacidad 
multiplicadora de los voluntarios que sostienen este servicio tiene un 
límite. «Mientras no se produzcan adopciones o acogidas, no podremos 
hacernos cargo de más animales», señalaba ayer Olga Costa.
En el refugio habitan, a día de hoy, unos setenta
 canes. Una cifra que supera con creces la cantidad prevista de 
animales-residentes, establecida en alrededor de medio centenar. Y es 
que en los últimos días, los nuevos inquilinos no han dejado de llegar. 
Que en una sola jornada desembarquen en las instalaciones tres o cuatro 
perros abandonados o perdidos se ha convertido en algo frecuente este 
verano.
Para muestra, los animales que ayer llegaron al 
refugio. Dos de ellos eran unos cachorros diminutos y frágiles que 
fueron salvados de una muerte segura por los guardias civiles que los 
recogieron del contenedor en el que habían sido arrojados. Los niños de 
la patrulla infantil fueron a por ellos al cuartel y durante toda la 
mañana los alimentaron y los trataron con un mimo que hasta ahora los 
pequeños animales nunca habían sentido.
Hasta el refugio fue trasladado también un perro 
encontrado por las patrullas de voluntarios vagando por las calles de 
Cambados. Se trata de un perro blanco, con chip y bastante bien cuidado,
 que podría pertenecer a alguno de los feriantes que se instaló en la 
villa durante el Albariño. El cuarto inquilino que se sumó al refugio 
durante la jornada es un boxer que, pese a no tener chip, tiene dos 
collares.
Pero que los canes tengan dueño no significa, por
 desgracia, que el propietario vaya a buscarlo al refugio de Cambados, y
 eso que los responsables del mismo  publicitan a través de las redes 
sociales todas los «peludos» que se van encontrando. Aún así, la mayoría
 de ellos se ven abocados a seguir engrosando la lista de inquilinos del
 refugio, a la espera de que alguien los elija para llevárselos a una 
nueva casa, bien sea mediante una adopción o un acogimiento temporal.
En ese sentido, Olga Costa quiso ayer dar las 
gracias a los vecinos de la comarca que participan en estas campañas. Y,
 especialmente, a los de O Grove, ya que «el noventa por ciento de los 
animales en adopción que salen del refugio se van para allá, al menos 
por lo que a este año respecta». Costa destacó también la solidaridad de
 los mecos, que «muchas veces encuentran un animal y durante unos días 
lo tienen en su casa, mientras buscan a los dueños, para no saturar el 
refugio».
Si ese ejemplo cundiese, las instalaciones 
cambadesas podrían tomarse un pequeño respiro. Y más en verano. Porque 
parece que sigue habiendo quien considera que el verano, la toalla y las
 cremas de sol no casan con la responsabilidad de tener una mascota.
Buena parte de los canes que son adoptados dejan Cambados con destino a O Grove
 
Fuente:  http://www.lavozdegalicia.es/noticia/arousa/2014/08/07/refugio-cambados-saturado-tras-rescates-varios-perros/0003_201408A7C3991.htm

